Capítulo 8.
“Cuenta regresiva (Parte 2)”
“Trataré de no olvidarte… ni de
dejarte… trataré de quedarme lo más que pueda, solo prométeme que será en mí en
quien pienses cuando mis labios toquen los tuyo… que seré yo el dueño de tan
valioso tiempo”
- ¿Irte? –Yoochun preguntó algo nervioso.
- Sí… es que tengo premiaciones y esas cosas…
- Pero… ¿Por cuánto tiempo?
- No lo sé… en el viaje también estaré escribiendo mi libro y estoy
pensando publicarla en Inglaterra.
- Pero… Junsu ah…
- Quiero también viajar… y conocer más lugares –Comentó Junsu, sin darse
cuenta que la mirada de Yoochun se había entristecido - ¿Quieres viajar
conmigo?
- Junho también decía lo mismo…
Y Junsu sintió la opresión en su pecho. Su petición había quedado en el
olvido… por Junho.
*****
Restauran History.
- ¡Salud!
Las cosas sonaron al ser chocadas entre sí. Junsu les
miraba divertido… estaba feliz de haber vuelto a casa
- Junsu… ah… que genial que ya llegaste, hyung –Junsu
asentía divertido a las palabras de Minho, viendo a sus amigos, a esas personas
que le dieron un espacio en sus corazones para él.
- Yo también me alegro de estar en casa, chicos… no saben
cuántos los extrañe –Comentó con una sonrisa afable y tranquila –Y fue grato
que en Estados Unidos me encontrara con Heechul –El peli anaranjado sonrió
cariñoso, cuando vio a Junsu se sintió emocionado… pero cuando descubrió la
verdad se sintió tan dolido y entristecido… había aprendido a querer mucho a
Junsu.
- Hyung –Junsu volteó a ver a Changmin.
- Dime.
- ¿Cuándo es la conferencia? –Preguntó curioso.
- Como una semana después de que publique el libro –Hizo
memoria.
- Estoy curioso por saber qué dice tu libro –Junsu sonrió
a medias a lo dicho por Changmin.
- Ya verás…
Junsu les miró a todos, se sentía con un peso menos…
porque los estaba viendo… a cada uno de ellos… Los veía. Y podía decir que se
sentía contento en ese momento, algo más lleno, algo más satisfecho… porque a
pesar de todo tenía muchas cosas lindas en ese momento que realmente no lo
cambiaría por nada.
*****
“Esa tarde que me reuní con
ustedes… que tuve la gracia y el tiempo de mirarles y apreciarlos a cada uno,
mi corazón se relajó. Me di cuenta que no faltaba casi nada por sentirme
completamente satisfecho.
Faltaba lo importante… que
cierto chico recuperara su corazón perdido.
Y que Micky fue sincero… y de
una vez se llevase lejos mi corazón.
Quiero decir que les amo,
porque han llenado mi vida de ese color que carecía anteaño…
Gracias por darme una cabida en
sus vidas… por abrirme los brazos y acogerme en ellos.”
******
Casa Jung.
- Gracias por dejar que me quede –Dijo Junsu sonriéndole
a Yunho.
- Sabes que no debes agradecerme –Yunho le miró
extrañado, Junsu lucía extraño, pálido y respirando raro - ¿Te sientes mal?
Junsu le miró confundido - ¿Eh? No… no es eso –Sonrió
tratando de calmar a su amigo –Es que… tengo sueño, será mejor que me vaya a
dormir…
- Junsu… no me mientas –Pidió Yunho tomándole de un brazo
para que no se fuera –No soy estúpido, me he dado cuenta de que has bajado más
de peso, de que tienes más ojeras, que apenas y comiste en el restaurant.
- Yunho… tranquilo, es el cansancio.
- No me mientas, Junsu ah… -Y pronto Junsu se vio entre
los brazos de Yunho.
La cabeza de Junsu comenzó a dar vueltas de lo mareado y
mal que se sentía. Afirmarse en Yunho fue lo único que pudo hacer antes de que
las piernas no le sostuvieran y la vista se le fuese a negro por completo.
- ¡Junsu! –Yunho le afirmó, haciendo un esfuerzo logró
tomarle en brazos y recostarle en una cama de las habitaciones cercana - ¡Ey!
¡Junsu!
Yunho estaba preocupado, el cuerpo de Junsu se sentía algo
ligero, no hacía falta preguntar para saber que algo andaba mal con Junsu.
Llevarle a su cuarto y llamar a un médico fue su
prioridad… en ese momento la salud de Junsu se notaba tan delicada que le
asustaba en todos los sentidos posibles, era como si pudiese saber que algo
andaba mal… y que no le gustaría descubrir lo que era.
La llegada del doctor lograba que el corazón le latiera a
tope, que se moviera en mecánico a cada cosa que le decía.
Inconsciente…
Pulso bajo…
Ambulancia…
Emergencia…
- Cáncer… -Murmuró sin creérselo luego de unas horas… de
estar ahí en hospital esperando saber de su amigo.
*****
2 días después.
No había dicho nada a nadie… porque en el estado que
estaba Junsu podía suponer que el menor ya lo sabía… y que tenía motivos para
no haberles dicho nada a nadie.
- ¿Por qué…? –Junsu recién había despertado, pero él
necesitaba con urgencia saberlo.
- Porque así estaba destinado, hyung… -respondió apenas.
Yunho negó… Eso no era verdad. – ¿Por qué…? ¡Debiste
decirme! ¡Soy tu amigo! –Junsu le miró con aprehensión –Soy tu amigo, Junsu… -Y
las lágrimas de Jung no se hicieron esperar.
- Hyung…
- Yo tenía derecho a saberlo… hace tiempo –Junsu asintió.
- Lo sé… pero contarlo… era dar por hecho el final… que
me aterra –Yunho le miró, sorprendido, preocupado… -No estoy preparado… yo no
estoy listo…
- Junsu…
- Tengo miedo… -Y Yunho le abrazó, de forma cálida y
fraternal –Hyung…
*****
“En estos últimos días estoy
sumergiéndome en un mundo oscuro del cual quiero escapar… pero no tengo ni idea
de cómo hacerlo… a mis 21 años, debería saber hacer algo, pero no hay nada.
Tal vez jamás aprendí
suficiente de la vida…
¿Pero quién puede decir que ha
aprendido suficiente de la vida?
Yo, personalmente, creo que
nadie… y quien lo diga es mentiroso… sentirse satisfecho con lo aprendido, es
otro tema.
…
…
..
He tenido falencia de algunas cosas… y en
otras tantas he estado satisfecho.
U-know… dejarte… será doloroso
y aunque quisiera superarlo sé que jamás podré… porque no alcanzará el tiempo
para hacerlo.
******
Casa Jung.
Junsu volvería a casa al día siguiente en la tarde, y por
petición del menor él volvió antes para descansar.
“Por favor hazlo… Si quieres complacerme, ve a descansar… no es mi agrado
saber que te descuidas por mí”
Y tuvo que hacerle caso, dejarle en el hospital… al menos
solo no iba a estar, ya que Heechul se quedó haciéndole compañía al menor.
Todo lo que estaba sucediendo le tenían con el alma en un
hilo… había sido muy de golpe… muy sorpresivo.
Junsu…
Era algo que simplemente no podía caer en su interior…
no, es que se negaba a aceptar aquella realidad… no podía ser cierto, él no
podía estar por perder a Junsu… él no podía estar por perder de nuevo a un ser
querido… no podía, simplemente no podía y no quería.
*****
Estaba preocupado por Yunho, no contestaba sus llamadas
ni de celular ni al de la casa, tal vez algo le había sucedido y ante ese
pensamiento Jaejoong no supo qué hacer… tan solo ir a ver si le encontraba en
casa y preguntar qué es lo que sucedía.
Juntando todo el valor posible fue hasta allá… Con el
corazón golpeteándole y retumbando, era un presentimiento no muy alentador.
Tocó el timbre… una vez… dos… tres… hasta que ya en la
cuarta fue abierta.
- Jaejoong ah… -Yunho le miró sorprendido y a la vez algo adormilado.
- Oh… lo siento no quise despertarte, vengo más tarde –Y
trató de irse, pero fue detenido por una mano de Yunho.
- No… quédate… por favor –La voz de Yunho sonaba extraña.
- Yunho… -volteó para mirarle, percatándose de esas
marcadas ojeras, de esos ojos rojos y la barba de días - ¿Qué sucede, Yunnie?
–preguntó acariciándole el rostro con tranquilidad, soltando una sonrisa floja
al ver que Yunho cerraba los ojos ante su tacto.
- Vamos… entremos… -Contestó Yunho, él no podía decirle
aquella verdad –Tendrás que disculparme, he estado atendiendo unos asuntos
familiares que pues no me han dejado descansar como se debe –Jaejoong asintió,
poco y nada convencido con esa burda escusa dada por el moreno.
- Ok… haré como que te creo, Yunho… -Respondió jalándole
de la mano en dirección a la habitación del menor –Ven… debes descansar –Dijo
sentándose apoyado en el respaldo de la cama para atraer a Yunho a su lado y
que apoyase su rostro en su pecho –Puedo ver bien que debe ser algo grave para
que te tenga en este estado –Yunho apretó la mandíbula –Pero también puedo ver
que no es algo que puedas contarme, y comprendo, Yunho…
- Jaejoong ah…
- Ahora descansa, yo te cuidaré –La voz de Jaejoong
sonaba consoladora y amortiguadora… como un sutil sedante necesario en su vida
en ese momento.
- Gracias… -No había duda alguna de que ese era el
Jaejoong que tanto buscó.
******
Días después.
- Hyung… me alegro de que ya estés bien –Comentó Changmin
al ver que el mayor escribía en su laptop.
–Tengo que terminar esto, Changmin ah –Contestó Junsu sin
desviar su mirada de lo que escribía.
- Ok… solo porque me gusta como escribes te dejaré pasar
el hecho de que no estés descansando –Junsu sonrió - ¿Tienes hambre?
- Un poco… Quisiera comer sopa de pollo con arroz,
Kimchi…algo tradicional –Changmin sonrió.
- Lo supuse, Minho se ofreció a cocinar algo rico, así
que esperemos a que esté lista la comida ¿Vale? –Pidió sentándose a sus pies
–Hyung… ¿Puedo preguntarte algo?
Junsu asintió… dejando de escribir las últimas páginas de
su libro.
- ¿Qué sucedió con Yoochun? –Junsu se tensó ¿Qué pasaba
con Yoochun? Él no le había buscado, en ni un momento… Las cosas habían quedado
en la despedida…
*****
- Si esto es de verdad… siempre sabrás de mí, Yoochun ah –Comentó Junsu,
luego de haber intimado nuevamente.
- ¿Mm? –El pelinegro le miró algo confundido ante esas palabras.
- Eso… Yoochunnie… yo… Me iré a los Estados Unidos en dos días –Dijo con
una sonrisa.
- ¿Qué? –Preguntó preocupado, se sentó mirándole serio - ¿Irte? ¿Cuánto?
¿Por qué?
- Sí… tengo unas cuantas entrevistas y promociones de mi libro… me quedaré
un tiempo allá para terminar el que sigue y eso… tal vez vaya a Canadá, Brasil,
México… pues –Suspiró –tengo una agenda apretada.
- Junsu ah…
- Necesito irme…
- ¡¿Por qué?!
- Porque quiero asumir todo lo que ha pasado, Yoochun –Le tomó del rostro
–Necesito un respiro de todo esto… Lo necesito.
- ¿Por qué? ¡No quiero! –Junsu le beso lento –Junsu…
- Llegué a Corea porque quería ver a Junho… pero no pude… mi madre me
detestaba, no importa cuanto lo haya intentado, jamás fui de su agrado… pero la
amaba… y ella murió… y aun así no me quiso a su lado en sus últimos días…
*****
- No te quiero aquí Xiah
–Gimoteó la mujer al menor, ese que le miraba completamente destruido.
- Eomm…
- ¡Cállate! No lo soy… Mi único
hijo es Zuno… y ahora iré con él… con mi único hijo –Xiah simplemente se quebró
con esas palabras y salió de ese cuarto.
Tanto Micky como Hero pudieron
estar ahí con ella sin que los echara… pero era su madre, no la de ellos… ¿Por
qué no podía quererle un poquito más? Mínimo aceptarle como su hijo.
- Xiah… -La voz de Micky le
hizo levantar la cabeza - ¿Por qué no puedes ser más consciente de que en su
estado no puede disgustarse?
¿Qué? Xiah parpadeo ante esas
palabras.
- No es tu madre la que se está
muriendo… no es a tu madre la que le han dicho que en cualquier momento la vida
se le escapa… No es a ti a quien le ha escupido en la cara cuan poco te quiere…
- Xiah…
- No necesito la lastima de
nadie, viví solo sin nada por años… viví solo con el anhelo de que algún día
vendrían por mí… He estado solo, Micky… queriendo saber qué es un familia… No
me pidas que no quiera estar con ella… no me lo pidas ¡No me lo pidas! –Dijo
desesperado.
- Xiah… -Y le abrazó… porque
pareciera que nada más podría calmar a ese muchacho, ese que se aferraba a sus
ropas con desespero.
Cuando la mujer se rindió al
sueño, Xiah fue capaz de entrar y cuidarle, acariciar su mano, su rostro y su cabello.
Susurrarle que debía estar bien, que pronto estaría mejor en un lugar cálido.
Cantándole una nana para que
descanse… para que su partida fuera tranquila… para que ella no sufriera más
por la familia que perdió.
- Pronto estarás con aquellas
personas que tanto amas, eomma… -Dijo con una sonrisa triste, con las mejillas
mojadas –Sabes… siempre he querido decirte algo importante –susurró besando sus
nudillos –Te quiero…
Habían cosas que jamás
entendería… él simplemente fue abandonado a su suerte, bien lejos para que no
pudiera hacer nada para volver, para que ella no tuviese problemas… él no había
sido querido… Y tenía que afrontarlo, aunque doliera… aunque le hiriera y
partiera el corazón en dos.
Dejó unas rosas de un rojo
elegante en la tumba de su madre, mirando con aprehensión el lugar… él se había
quedado sin familia.
*****
- Necesito esto… necesito tiempo… necesito encontrarme de nuevo –Susurró
despacio, mirándole a los ojos... Eso ojos de un negro profundo, que le hacían
sentir perdido a y ñla vez confortado.
- Yo…
- Te servirá… -Comentó acariciándole el cabello –Te servirá porque también
lo necesitas, será mejor para los dos.
- No quiero que te vayas…
- No me iré para siempre… es mi trabajo y quiero hacerlo bien, disfrutarlo
y aprender –Comentó Junsu con esa sonrisa tierna que siempre le caracterizó,
con sus facciones aniñadas calando hondo en el interior de Yoochun –Volveré…
- Sabes lo que esto implica… -Murmuró el pelinegro.
- Lo sé… -le miró algo triste –Porque desde el comienzo esto no es nada… Sé
que tal vez no me buscarás ni esperaras a por mí, pero quiero tu felicidad… Aun
si no vienes a mí, Yoochun ah…
- Yo no me ataré a nadie… porque tengo a Junho… -Comentó –Pero aun así… no
quiero que te vayas.
- No me iré para siempre.
- Y yo no te esperaré por mucho…
*****
Conferencia de prensa.
Libro “Lectura para
amantes”
- Esto es sorprendente, luego de un año, volvemos a tener
al joven revelación de vuelta a su país –Junsu sonrió.
- Es un agrado estar de vuelta en casa… -Comentó con una
pequeña sonrisa –A pesar de que no me crié aquí, cuando volví de Inglaterra
hace un año conocí a muchas personas importantes en mi vida –Comentó surcando
una sonrisa más melancólica –Ellos fueron los que me empujaron a que siguiese
escribiendo, han sido mi fuerza y lo mejor que me ha pasado en la vida.
- Siempre dices en las conferencias que los personajes de
tu libro, a cada uno, les tienes un cariño especial ¿Por qué? –Uno de los
entrevistadores preguntó.
- Mmm… Ellos nacieron de la conciencia de un niño de 10
años…
- ¿Qué?
- Me refiero, a la madre y el padre de Zuno y Xiah, a
ellos también, y por ultimo a U-know –Hizo una pausa –Ellos hicieron de mí… y
de la historia, todo…
- ¿Podría darnos un adelanto de esta edición? –Junsu sonrió.
- Oh… pues no creo que eso se pueda hacer, solo les digo
que deben leerlo y que es la última parte de todo el drama.
- Con respecto a la dorama ¿Cómo se ha tomado el reparto?
–Junsu lo pensó.
- Me encanta… -Comentó –Cada personaje fue elegido para
que aprendiera algo distinto.
- ¿Cómo es eso?
- Lo sabrán en otra ocasión, aunque debo decir que me
gusta como se ha llevado la historia a través de los capítulos que han sido
emitidos, cada actor en la serie ha tenido una mejoría que se puede notar…
Espero que ellos cuiden de los personajes tanto como yo he cuidado de ellos.
La conferencia siguió su transcurso, pregunta por
pregunta Junsu fue contestando, sonriendo, riendo… promocionando… despidiéndose.
******
“Alguna vez creí la existencia
completa se tenía cuando se encontraba el amor… pero hoy me doy cuenta de que
una nueva nace al descubrirlo”
******
Junsu caminaba a paso lento, se sentía mareado. La
conferencia le había agotado por completo. Y cada vez era peor, el cansancio le
llegaba antes, con pocas acciones… y eso sólo le asustaba algo más.
- Junsu ah… -Era una voz ronca y profunda –Su…
- Yoo… chun… -Le miró sorprendido al verle ahí, con ese temple
elegante y seductor - ¿Qué… haces aquí? –Preguntó nervioso.
- Esperé demasiado, Kim Junsu…
- ¿Eh?
- Eso… que esperé demasiado a que llegaras a mí, que ya
no te seguiré esperando.
Las palabras de Yoochun caían como aguijones en el
interior de Junsu, porque eso significaba que le perdía por completo… de que en
ese momento acabaría todo.
- No necesitaba venir a decírmelo… -Respondió el menor de
forma suave… tratando de no mostrar lo afectado que le dejaron esas palabras.
- Sí lo necesitaba.
Junsu le miró. - ¿Por qué? No era necesario…
- Lo era… -Yoochun comenzó a dar paso hacia él, paso que
solo marcaban el latir apesadumbrado que llevaba el corazón de Junsu –Porque debes
saber… -La mano de Yoochun tocando esas pálidas mejillas, que se sentían más
heladas de lo que podría él llegar a recordar –Que ya no puedo seguir esperando
a que vuelvas… -Un aproximación de rostro –Esta vez… iré yo hacia ti… -Terminó
de decir en un aterciopelado susurro, que tiño las mejillas del menor, que le
devolvió esa sonrisa infantil a ese rostro hermoso.
- Chunnie…
- Ya no hay escusas de por medio… -Junsu sonrió, tirándose
a los brazos del pelinegro, sintiendo esos cálidos brazos rodeándole, como
había extrañado esa sensación.
- Ya no podrás irte de mi lado…
- Yoochun ah… -Enmarcó el rostro del menor –Siempre estaré
contigo… Aun si no me vieras.
- ¿Eh? –Yoochun parpadeó confundido ante esas palabras -
¿De qué hablas, Su?
- Lo siento mucho… -Junsu se abrazó al cuerpo del mayor,
se perdió en calor de aquel pecho, se quedó ahí… porque el dolor se amenizaba
entre ese aroma a almizclé y el perfume del Yoochun, porque todo parecía más
suave y reconfortable… que caer en esos brazos sonaba fácil y agasajador.
- Junsu…
Porque perderse en esa voz era adictivo… fundirse en ese
cuerpo era su único soporte…
Quedarse ahí… sería un
imposible que siempre querrá cumplir.
*****
- Xiah… -Micky le sostuvo antes
de que callera al suelo –Xiah… ¡Ey! ¡Baby! ¡Despierta! –Pidió agitándose al ver
que Xiah no reaccionaba a sus palabras y que seguía ahí, con los ojos cerrados
y peso muerto.
Haciendo temblar a Micky por el
miedo que comenzó a carcomerle las entrañas…
- Xiah… -Su rostro escondido
entre las palmas de sus manos, desesperado.
- Micky… -Los brazos de Hero le
rodearon con calidez –Micky…
- Esto no está pasando otra vez…
hyung…
- Lo siento…
- No… -Gimoteó, la presión en
el pecho era grande, dolorosa y desgarradora –No quiero, no de nuevo… él no…
- Micky… -Hero le miró con
aprehensión, sin saber qué hacer o qué decir.
Las palabras de aquel médico
aun retumbaban en la mente de cada uno de los presente.
“No queda tiempo”
Xiah… ya no tenía tiempo.
Xiah… tenía que irse.
******
Hero contemplaba a Uknow… éste
estaba tan afectado, que no hablaba, sólo se dejaba abrazar, sólo se dejaba
envolver por sus tibios brazos, sólo se dejaba confortar por él.
En tanto Micky… tuvo que ser
sedado aquel día… porque la noticia había sido lo suficientemente devastadora para
él.
Porque había perdido nuevamente…
había perdido a un ser realmente puro.
Había perdido a Xiah.
Y esta vez sería un para
siempre, no había un volveré por medio de palabras dichas, nada… solo una
mirada y un “Lo siento mucho” revoloteando a su alrededor.
******
Epílogo.
¿Qué hacer con mi lágrimas que caen al ver tu rostro
dormido? No puedo dormir a pesar de que mi corazón ruega un descanso... Dime
¿Qué caso tiene estar a mi lado si tu felicidad no está? Se va volando como todo
en ti... eres la presencia inerte de tu existencia, presente de cuerpo y alma desvanecida.
Mi corazón se daña, y yo sólo
puedo verte dormir sin pronunciar palabras, eres tú que en un rincón de tu ser
desechas encontrar la felicidad.
Yo siempre estaré aquí velando
de tus sueños.
No te preocupes, busca tu
felicidad, yo veré cómo seguir sonriendo... por ahora sólo sonreiré mientras
observo tu rostro complacido… rendido al sueño.
Entonces ya no estés a mi lado,
aquí no está lo que buscas, lo que quieres no lo encuentras... entonces
duermes... deseas encontrarlo, es que a pesar de todo, lo nuestro se hizo
imposible. Como una caricia cálida en invierno. Difícil. Entonces, rehúyes de
todo, de mí mirada... Sufres y no sabes cómo actuar, mi corazón se comprime y
tan sólo sonrió esperando que entiendas que debes irte.
Aunque mis ojos supliquen tu
permanencia, no soy capaz de fomentar tu infelicidad, por favor ve en tu
camino, no pares ni voltees en tus pies para mirar. Ya no podemos estar juntos.
A pesar de que corra tras de
ti, tu camino y el mío se hizo tan distinto y aunque mi lágrimas siguen cayendo
porque el adiós se acerca, lo he asumido.
Entonces adiós amor... a pesar
de que no lo creas te amo, entonces adiós, amor...
******
Para Micky era más fácil llorar con esas
palabras en las manos… saber de esa forma amado, valorado, querido…
Solo queriéndole de vuelta.
Queriendo volver a ver a Xiah…
porque era difícil extrañarle a él. Porque no importaba cuantas veces se parase
frente su tumba, la soledad no dejaba de sentirse a su alrededor, y él no
dejaba de extrañarle. Él no dejaba de sentirse dolido y traicionado por esa partida
tan fácil y rápida.
*****
- Junsu ah…