Hijo de la Luna: Capítulo 16

Capítulo 16.

 

 

 

“Leyenda y corazón (parte 3)”

 

 

 

- Joven Shim –Esos labios no le dejaban hablar –Pa… pare…

 

- ¿Por qué? –Los labios del otro chico eran suaves y tersos ¿Cómo no querer besarlos a cada segundo?

 

- Puede venir alguien y vernos… Joven Shim –Posó sus manos en el pecho del mayor para así alejarle de él –Esto no está bien, joven Shim.

 

 

Changmin bufó.

 

 

- No me importa si está bien o no, yo no te voy a dejar –Habló en tono serio obteniendo uno de esos intensos sonrojos que se apoderaban de ese chico –Tú lo sabes, Minho…

 

- Aunque lo sepa… aunque sienta lo mismo que usted, Joven Shim… no quiero que esto cause problemas, no quiero causarle problemas. Me dolería mucho… -Terminó de hablar en murmullos y con cabeza agacha.

 

- Y a mí me duele que poco valgan mis sentimientos para ti.

 

 

Minho levantó su rostro, mirándole sorprendido.

 

 

- No has comprendido que elegí amarte… que me quedo contigo… que no me importa lo que dirán, sólo tú…

 

 

Abrazó el cuerpo delgado de Minho, besó sus labios con ternura… esa ternura que pocas veces muestra.

 

 

- Changmin sshi…

 

- Es… es un gran comienzo –Sonrió y le dejó apoyar su cabeza en su pecho.

 

 

 

 

****

 

 

 

Departamento Park.

 

 

 

Junsu se había quedado dormido acurrucado en él en una incómoda posición. Le tomó en brazos para recostarle en su cama y así dejarle descansar, como parece que no lo ha hecho el menor.

 

 

- En este momento me siento preocupado y culpable… Junsu ah… ¿Por qué?

 

 

Contempló con detenimiento… sus finas facciones, lo frágil que lucía, lo adorable y hermoso que era.

 

 

 

****

 

 

 

Departamento 2(Kim-Choi).

 

 

 

 

- ¡Changmin hyung! –volvió a lanzarse sobre sus brazos y mover su cabecita de lado a lado haciendo reír al mayor -¡Changmin hyung, Changmin hyung!

 

 

Canturreó feliz.

 

 

- ¿Qué sucede enano? –Preguntó en un tono que no puede describir pero que ama utilizar con ese pequeño ser.

 

- ¿Cuándo volverás a venir?

 

- Oh… no lo sé, Yoogeunnie… tengo muchas cosas que hacer en… -Un puchero marcándose en esos labios, ojitos vidriosos que alertaban un camino de lágrimas, respiración algo agitada y temblorcitos de cuerpo.

 

 

Yoogeun comenzó a sollozar…

 

 

- No… no llores, bebe –Pidió sintiendo su corazón estrujarse con fuerza ante ese rostro.

 

 

Desde el Viernes, hace ya 3 días, comenzó a ir la tarde entera para jugar con Yoogeun (nótese, sólo han sido tres días), Minho siempre tiene dulces para que coman y de vez en cuando se une a sus juegos.

 

Les ha tenido cerca y se ha sentido completo de una forma inigualable… ha querido que esto se repitiese por siempre.

 

 

- ¿Yoogeunnie? –La voz de su eomma le dio a conocer que ya no estaban solos.

 

- Eomma… -Sollozó un poco más fuerte y estiró sus bracitos al nombrado.

 

- ¿Qué sucede mi amor? –Le cargó entre sus brazos sintiendo como su bebe se aferraba a su cuellito y mojaba su hombro.

 

- Qui…. Qui… ro… qu… queda… rme… cun… Changmin… hyung –Dijo entre hipidos y sollozos imposibles de no dar.

 

- Ya mi amor, tranquilo… recuerda que Changmin hyung es una persona ocupada y si no puede venir a verte tú no tienes que hacer estas escenitas ni menos frente a él… le harás sentir culpable –Susurró en tono maternal, acariciando la pequeña espalda de su tesoro.

 

- ¿Por qué no puede hacerlo? –Voz ronca proveniente del morocho.

 

- Es lógico… te hará sentir culpable –Contestó sin dejar de acariciar a su bebe.

 

- Yoogeunnie… -Le llamó –Ven… -Pidió estirando sus brazos.

 

 

El menor se separó un poquito mirando a su umma con duda.

 

 

- Es tú decisión, mi amor –Tal vez en un principio quiso alejarles… pero pareciera como si la sangre les llamase, Yoogeun congeniaba tan bien con Changmin… parecían quererse de un forma inexplicable, así como su amistad había nacido.

 

 

Yoogeun dejó que el moreno alto le cargara.

 

 

- ¿Pasó? –Obtuvo un asentimiento por parte del bebe - ¿Me escucharás, Yoogeunnie? –Otro asentimiento –Que no venga mañana no significa que no vendré más, pero si no cumplo con mis deberes ya después no tendré tiempo para verte y me encanta jugar contigo –Yoogeun le miro con sus ojitos aún acuosos mirándole con ilusión y felicidad… para luego recibir un abrazo encantador por parte de esa ternura andante.

 

 

“Hay momentos en que me he convertido en un verdadero egoísta, como en este momento… y más que nunca hoy sé que te merecer la verdad, porque lo veo en tus ojos… la ilusión de tenerle siempre a tu lado, la misma ilusión que suelo ver en mis ojos cada vez que pienso en mi pequeño angelito… Tan sólo prométeme que de mi lado no me lo quitarás y que querrás esa felicidad que por estos cinco años he buscado brindarle…”

 

 

Minho suspiró mirándoles… lo haría. Le pediría a Changmin un poco de tiempo y se lo contaría… cómo no tiene idea de cómo hacerlo… lo hará, le mostrará pruebas y por último, si no le cree, solicitará un ADN…

 

 

- Te quiero, Changmin hyung… -Es voz dulce e infantil removió su mundo de forma extraordinaria con esas lindas palabras.

 

- Yo también te quiero, Yoogeunnie… Como no tienes idea –Besó su frente ganándose un besito en la nariz por parte de ese menor que volvía a mover su cabecita mirándole curioso y con felicidad.

 

- Nunca olvides lo que esos pequeños ojos muestran, Changmin sshi… -La voz de Minho lo sacó de su mutismo y luego le vio perderse por el pasillo en una de las habitaciones.

 

 

 

****

 

 

 

Departamento Park.

 

 

 

Yoochun se había ofrecido a acompañarle a ver a su hermano, que se tomara el día y que fuesen hasta Busan, pero él se negó.

 

 

“No saco nada con ir ahora, Yoochun ah… “

 

“No es sólo cosa de ir y hacer acto de presencia, aun no es el momento de que vaya a verle”

 

 

 

- Junsu ah… -Suspiró su nombre mirando a un punto fijo del techo de su habitación –Agitas mi mundo y me haces sentir cosas inesperada… pero cala un frío enorme el pensar que no es cierto… es tanto que me da miedo ¿Por qué?

 

 

 

 

****

 

 

 

Busan.

 

 

 

Yunho corría, una enfermera le había notificado que Jaejoong reaccionaba… sus piernas se movían lo más rápido, quería verle, abrazarle… sentir que está ahí que no se ha ido, que no se ha escapado de sus manos.

 

 

- Jaejoong… -Murmuró su nombre al llegar a la puerta de la habitación de este. La abrió con cautela… viéndole ahí sentado y con semblante pálido y agotado… pero estaba ahí –Jaejoong ah… -Sus ojos se cristalizaron y ya de la nada se vio abrazando con sumo cuidado a ese ser delicado –Mi… Joongie…

 

- Yu… Yunho ah… -Se sintió avergonzado y más por esos besos dejados en su rostro con tanto cariño y esa enfermera que de años conoce al moreno les dejó solos… de todos modos Yunho era médico, podía cuidar de su esposo.

 

- Lo lamento mi amor… de verdad… -Dejó sus lágrimas caer, esas de felicidad e impotencia, de dolor y agradecimiento –Perdóname, por favor… Jaejoong ah…

 

- Me vi solo… Yunho –Habló el pelicastaño –solo y dolido… con suerte y podía mover parte de mi cuerpo y no sentir ese… ese dolor talante… me vi solo y perdido… -Yunho abrazó su cuerpo, acariciando su espalda.

 

- Perdóname…

 

- Pero entonces escuché una voz… Yunho –El moreno le separó un poco para verle –Y esa voz me pedía… que no me fuera… y que le perdonara –Sonrió débilmente por su estado –También dijo que me ama… que soy el amor de su vida –Respiró hondo –Yunho… ¿Sigo siéndolo para ti? ¿Sigo siendo el amor de tu vida?

 

 

Jung regaló un beso sobre su frente.

 

 

- Eso jamás debes olvidarlo, Jaejoong ah –besó esos labios algo pálidos con dulzura –Yo te amo con todo mi ser… no puedo dejarte, amor… por eso perdóname.

 

- Yo te perdoné, Yunho… sino… no hubiese vuelto.

 

 

 

****

 

 

 

Restaurant Your History.

 

 

 

Había sido extraño que Minho le invitase a comer y por algún motivo se sentía nervioso. Se había arreglado bien para estar más que presentable sin saber el por qué.

 

 

Hasta que le vio entrar con ese caminar elegante que a pasar de los años sigue teniendo, con su porte varonil pero a la vez sutil y delicado. Le examinó por un momento… Minho había cambiado mucho y nada. Ese carácter infantil que le hubiese caracterizado alguna vez pareciera que se vio de algún modo obligado a madurar de forma más radical.

 

 

- Hola, Changmin sshi –Saludó con tono que revelaba un matiz de nervios.

 

- Hola, Minho ah… -Se preguntó por qué Minho lucía de esa forma, tan nervioso y con esa bolsa grande que guardaba unas carpetas.

 

- Siento a verte hecho esperar –Shim negó con una sonrisa.

 

- Tranquilo, no fue mucho –Vio como este hacía un pequeño puchero… -Sí… si ya sé que te gusta llegar mínimo puntual… -El menor asintió –Ya siéntate, que me dio hambre.

 

- Nunca dejarás de ser un pozo sin fondo… -Le molestó.

 

- Ante no te molestaba –Comentó asiéndose el ofendido y ambos rieron.

 

 

En toda la cena Changmin cuestionó a Minho con cosas de Yoogeun, como qué le gustaba, su color favorito película favorita, entre muchas cosas otras.

 

 

- Este fin de semana tienes libre –Choi le miró y asintió como si nada –Quiero salir contigo y Yoogeun… No le veo hace días y ya le extraño –E hizo ese gesto pucheroso que siempre hace su bebe, tan igual al de Changmin.

 

- Está bien, Yoogeunnie estará feliz… -Contesto con una leve sonrisa, comenzando a sentir un leve temor.

 

- Oye… ¿Y la madre de Yoogeun? Desde que llegaron jamás hablas de ella, y Yoogeun pareciera no extrañarla… él insiste que no tiene eomma “mujer” ¿Por qué? –Ahí comenzaba su calvario.

 

- Porque no tiene, Changmin… -Dijo mirándole a los ojos tratando de respirar de forma normal.

 

- Oh… lo siento – ¿Así que la madre de Yoogeun había muerto? –Otra pregunta ¿Por qué te fuiste y dejaste la empresa de tu familia? Creí que serías uno de los que la administraría ¿A caso tus padres no aprobaron a la chica que te fuiste con ella a Japón? –Que conclusión más errónea…

 

 

“Shim Changmin, tienes problemas” –Se dijo mentalmente Minho.

 

 

- ¿Qué te hace creer que me fui por causa de una mujer? –Preguntó recargando su rostro en sus manos.

 

- ¿No sería lo más lógico? –Minho parpadeó dándole a entender con ese gesto que continúese –Porque la embarazaste, se lo notificaste a tus padres y con lo cerrado de cabeza que es tu padre discutiste con él y preferiste marcharte a seguir una discusión o tal vez te condicionó y no lo soportaste por ellos dijiste “adiós” a Corea –Minho le miraba, si supiera que es parecida la historia per son mujeres y solo enfrentando a su familia…

 

- No vas tan perdido… pero ya te había dicho que Yoogeun no tiene una eomma “mujer –volvió a decir.

 

- Entonces no comprendo… -Dijo sin saber qué pensar, porque ese niño adoptado no es… por más explicaciones que le pudiesen dar sobre cómo se puede alterar el fenotipo según ambiente… Ese niño era una viva imagen de Minho.

 

- Mi cuerpo sufre una anomalía a la que se le llama enfermedad MKútero –Changmin parpadeó sin comprender –Esta enfermedad afecta a hombres, en el mundo sólo hay 5 personas con esta enfermedad y se desconoce quiénes son –Changmin comenzó a tener leves sospechas… podría ser que… ¡NO ESO NO! ¡JAMÁS!

 

 

¡MINHO SERÍA INCAPAZ DE EMBARAZAR A UN HOMBRE!

 

 

- ¿Qué tiene que ver Yoogeunnie con todo esto? –Preguntó con tono receloso temiendo que ciertas palabras le alejasen de ese bebito tan hermoso.

 

- Mucho… porque de ahí radica el misterio de su nacimiento, Changmin ah… -El moreno puede afirmar que siente que Minho no habla con claridad absoluta.

 

- Te mostraré algo –sacó de esa bolsa una de las carpetas donde mostraban ecografías –Son de Yoogeunnie… -Dijo rememorando esos tiempo donde su hermano, amigos y los Kim le cuidaron mucho y velaron por su salud y corazón.

 

- Esta es de cuando tenías 5 meses… -Dijo maravillado -¿Tienes las primera? –Minho negó –Porque fue imposible obtener de los primeros dos meses -¿Por qué? ¿Y qué tiene que ver todo esto con lo que me acabas de contar? No me dirás que embarazaste a un chico…

 

- Mira de quienes son esas ecografías… -Musitó con seriedad.

 

- Son de Yoogeunnie… -Minho negó - ¿Entonces?

 

- De quien lo llevaba en su vientre…

 

 

Shim recién pensó en ese detalle y lo hizo… leyó el nombre, sin dar crédito a lo que veía…

 

 

“Informa ecográfico 20 semanas

 

Apellido: Choi

Nombre: Minho

Fecha de nacimiento: 9/12/1991”

 

 

- Yo soy la “eomma” de Yoogeun, Changmin ah… -Corazón latiendo aprisa –Soy una de esas cinco personas con esa extraña enfermedad…

 

 

El moreno no daba crédito a lo que leía… ahora comprendió el por qué ese hermoso angelito decía cosas extrañas que nunca supo comprender, como: “No tengo appa” o cuando le gritó a Minho “eomma”… esa misma vez en antes de que el menor lo internaran en el hospital le llamó “eomma”.

 

 

- ¿Es por eso que te fuiste… hace 5 años? –Minho suspiró… la conversación iba a terminar en su confesión así como se dijo así mismo que debía terminar.

 

- Mi padre me dio un ultimátum… o mataba a Yoogeun o me iba de la casa sin herencia –Sonrió con algo melancolía… Changmin le miró asustado –Pero te abras dado cuenta que una herencia no me importa en lo absoluto…

 

- ¿Por qué no me lo dijiste? –Cuestionó con algo de seriedad.

 

- Por una razón importante… que ahora en este momento puede parecer absurda… y que en ese entonces fue mi único salvavidas…

 

- ¿Por qué…? –Reiteró su pregunta.

 

- Por quien es el padre… -Musitó.

 

- ¡¿Quién es el padre?! –Cierto tono de rencor utilizado… cierto miedo se deslizaba entre sus palabras, cierta ilusión de un sentimiento indescriptible.

 

- Tú…

 

 

 

****

 

 

 

Hospital de Busan.

 

 

 

- ¿Siwon sshi? – ¿Qué hacía el mayor de los Choi en un hospital en Busan?

 

 

El nombrado volteó hacia esa voz.

 

 

- ¿Heechul sshi? –El pelinaranjo se acercó a su persona.

 

- ¿Qué haces aquí? ¿Estás herido, enfermo? ¿Qué? –Preguntó asustado.

 

- Estoy bien, acompaño a un amigo que al parecer se lesionó –Kim soltó el aire contenido.

 

- Creí que estabas lastimado… -Murmuró con un dejo de preocupación destilando en sus palabras.

 

- Estoy bien, no te preoc… -Esperen… ¿Kim Heechul preocupado por él? – ¿Estás preocupado por mí? –Preguntó asombrado… ese adorable chico con el cual ama pelear realmente se preocupa por su persona…

 

- ¿Qué… no… no puedo? –Nervios… no se había acordado que Siwon y él pelean cada que se ven.

 

- Puedes… es sólo, vamos sabes que nos las pasamos discutiendo –Rio Siwon de una forma que sólo hizo que el corazón de Heechul latiese apresurado.

 

- Babo…

 

- Me alegro… -Comentó el alto.

 

- ¿Eh?

 

- Me alegro… de que te hayas preocupado por mí, eso quiere decir que no me odias –Dijo y luego fue llamado por una de las enfermeras –Bueno, espero verte luego. Adiós Heechul sshi.

 

 

Kim se quedó mirando ese caminar tan varonil con otros ojos.

 

 

- ¡Yah! ¿Qué diablos me pasa? –Es que no podía ser cierto que su corazón latiese de esa forma tan desbocada con tan sólo notar detalles de hombre, que desde que conoció, ha encontrado guapo.

 

 

 

 

****

 

 

 

Heechul se llevaría ese día a Dain del hospital, él debería seguir por ahí rondando para cuidar de su esposo.

 

 

- Vamos con tu eomma, debe extrañarte –Dain frunció el ceño meditando a cada paso.

 

 

Jaejoong se veía algo más repuesto y ya había preguntado por su bebe, que la necesitaba… mínimo quería verla.

 

 

- Oh, Dain ah… Amor –Dain se dejó abrazar por su appa - ¿Vienes a ver a tu eomma? –La menor no contestó, Yunho miró sus ojos y estos parecían tan extraños.

 

- Jaejoong me ha insistido en que antes de irnos le dejase verle –Heechul sonrió, Yunho se reincorporó asintiendo.

 

- Pasen, Jaejoong estará feliz.

 

 

Heechul trató de entrar con Dain, pero esta hizo peso en contra tirándole del brazo negando fehacientemente.

 

 

- Dain ah… -Su tío le miró extrañado.

 

- No quiero… No quiero verle –Gimoteó.

 

- ¿Por qué? Es tu eomma –Trató de hacerla entrar en razón, Heechul.

 

- ¡NO QUIERO!

 

- ¿Por qué? –Preguntó Yunho volviéndose a hincar mirándole con seriedad.

 

 

Dain vio esos ojos serios de su appa y tío, haciendo que sus ganas de no ver a Jaejoong aumentaran.

 

 

- ¡Porque eomma me mintió! –Gritó soltándose de la mano de Heechul… dejando que sus lágrimas corriesen –Eomma dijo que mi appa nos amaba… que… que… éramos importante, que si no… no… llamaba fue por… lo ocupado qu… que estaba –Heechul le miró con aprehensión –Ta… también dijo que… appa… le seguía amando ¡Y no es así! Y… y todo duele al… al pensarlo ¡Odio a mi Eomma por mentirme! –Gritó sin dejar de hipar.

 

 

Y la puerta fue abierta por un lloroso castaño.

 

 

¿Qué había dicho Dain? ¿Qué lo odiaba? ¿Su tesorito hermoso, su princesa… la prueba más hermosa que tiene de su relación con Yunho acabó de gritar frente a su puerta que lo odiaba?

 

 

- Dain… ah…

 

 

Pero la menor tan sólo lloró más fuerte y audible.

 

 

Yunho se sintió a morir… Eso… también era su culpa. Jaejoong lo más probable es que esté destrozado, al igual que su bebe ¿Qué tiene que hacer en ese momento?

 

Vio a Heechul haciéndole señas hacia Dain en tanto él abrazaba a su hermano menor.

 

 

- Dain chan –La voz de una mujer se escuchó y Dain pareció sentirse más aliviada al escucharla.

 

- ¡Chiharu sshi! –Volteó hacia esa mujer y corrió hacia ella abrazando sus piernas, rompiendo de forma escabrosa el corazón de Jaejoong.

 

 

Aquella mujer… era la misma quien besó a SU esposo, confiada de que este podría corresponderle, y que gracias a Kibum, que logró meterse en sus sueños, lo supo era arrebataba a su hija de su lado…

 

Heechul logró sentir el dolor que estaba sufriendo Jaejoong, ese que caía al suelo abrazando su cuerpo gritando.

 

 

- ¡Jaejoong! –Yunho le tomó entre sus brazos ingresándolo al dormitorio, instalando nuevamente todas esas máquinas que su esposo había quitado de un tiro, sedándole para que pudiese descansar… aunque sea físicamente.

 

 

Heechul se quedó algo helado, al igual que todas esas personas.

 

 

¿Dain rechazó a Jaejoong?

 

 

Eso no era nada bueno, los dolores que tendría Jaejoong serían tan fuertes como los que sintió al creerse traicionado por Yunho.

 

 

- ¡Jung Dain! –La menor le miró - ¡Ven en este instante!

 

- ¡No le grites! –Gritó Chiharu al mayor de los Kim.

 

- ¡Usted no se meta en el asunto y deje que MI sobrina venga! –Dain observó con culpabilidad ese ceño –Ya que no te interesa tu eomma, nos vamos. No tenemos nada que hacer aquí –Tomó la mano de la niña, recordándose a sí mismo que tiene tan sólo 5 años y está confundida.

 

 

Pero el corazón de la pequeña dolía, porque siente que hizo algo malo, que era culpa de ella ese grito de dolor que dio Jaejoong hace un momento.

 

 

Chiharu observó todo, se sentía confundida por lo sucedido con el idiota esposo de Yunho.

 

 

 

****

 

 

 

- Ah… -Un gemido más –Changm… min sshi… -Esa voz casi colapsada de tanto gozo y éxtasis del instante.

 

- Minho… -Las paredes de Minho apresaban su miembro y él se sentía perdido en ese mar de sensaciones, esa boca correspondiendo torpemente sus besos. Ese miembro húmedo que friccionaba contra la piel de sus cuerpos. –Ya casi… -Y el final siendo anunciado.

 

 

- ¡Changmin!

 

- ¡Minho!

 

 

La culmine de aquel encuentro inigualable… uno que les dejó sin alientos, uno que los obligó a unir sus labios cuando parecía que algo de oxígeno había llegado a sus pulmones.

 

 

- Te amo, Changmin…

 

- ¿Cómo yo te amo a ti?

 

 

Preguntó el mayor sobre su cuerpo, mirándole con infinito amor.

 

 

- Demasiado…

 

 

 

“Tanto así como para hacer todo lo que me pidas con tal de estar a tu lado, Changmin ah”

 

 

Luna observaba todo desde su postura, sonriendo porque uno de sus hijos al parecer estaba feliz en los brazos de un hombre que le miraba con amor y devoción.

 

 

“Luna quiere ser madre, y no encuentras querer que te hagan mujer. Dime Luna de plata… ¿Qué pretendes hacer con un niño de piel?

Ahhh ahhh

Hijo de la Luna”

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