Lectura para amantes: Prólogo

"A veces he querido pensar que me amas... a veces quiero pensar que volveras a mirarme.

He estado solo en la oscuridad infinita que ha dejado tu caminar... Me pregunto si de donde estás sabrás ahora lo que mi corazón siente... estoy perdido ¿Sabes? Estoy perdido y no estas para ayudarme...

Las promesas infimas se pierden en el son de una partida inesperada...

tus promesas queman mi corazón 

tus promesas me recuerdan lo que pasó...

Que no estas... que no te tengo y que jamás te tuve... que no te tendré y jamás me amaras.

¿He sido yo culpable del abandono de tu mirada?

¿He sido yo el culpable de tu opaca sonrisa?

No sonríes para mí... sonries para los demás...

No me miras ni me vez... no me buscas... no me quieres a tu lado.

No creo poder sostener más esta farsa... donde me sonríes amistoso y yo comparto tu alegría... 

Hoy me he rendido ante todo... hoy le digo adiós a mi corazón... 

Hoy me avandono a la soledad eterna... Hoy dejo de creer en este amor.

Adiós..."

- Wou Junsu ah, esas palabras... cada día mejoras ¿Sabías? -El menor le miró y asintió sonriendo levemente - ¿Cuándo me dejarás leer el avance?

- ¿Para qué quieres leerlo? -Le miró entre sorprendido -Jamás quieres leer lo que escribo, Yoochun ah. Sé que no te gusta, si que puedes dejar de fingir que te ha interesado -Rió viendo que su amigo sonreía con él y dejaba esa hoja de lado.

- Me has descubierto 

- Hay Yoochun ah, eres predecible ¿Sabes?

- Vamos Junsu ah, esta vez casi pudiste creertela -Junsu le miró, asintió sólo para que su amigo se sintiera feliz, pero sabe bien a Yoochun jamás le ha interesado nada de lo qu escribe ni cómo va su carrera como escritor -"Jamás te ha interesado lo que hago" -Sonrió tomando su taza con leche de chocolate.

- Eres un aduñtp y sigues tomando cosas de niño -El menor infló sus mejillas.

- ¡Yah! El café es para amargados -Le miró de reojos.

- Yo no soy un amargado -se defendió.

- Sí lo eres -Provocó en fruncimiento de cejas del pelinegro.

- ¿A sí? -Junsu asintió infantilmente... sabiendo lo que vendría ahora.

"Los labios de Yoochun contra los propios... los labios de Yoochun debeorandele con besos desesperados"

- ¿Ansioso? -Preguntó el rubio sonriedole.

- Algo -Asintió, no había nada mejor que descargar su fogosidad en su amigo... Sí en su amigo, nada más que eso.

- Bueno... pero sé suave... -Pidió enmarcando el rostro del pelinegro para luego besarle con premura.

"Yo he caído nuevamente en las redes de tus besos... pero ya no más... hoy quiero despedirme, dejar que mi corazón descanse... hoy quiero dejar de ser tu amanete"